Ay Crisanto el picha alegre

Más descendientes de Crisanto
Las pruebas de ADN confirman que dos hermanas de Santa Comba son hijas del empresario de Cee cuyo cadáver desapareció del cementerio en diciembre de 2009


Lápida donde fue enterrado Crisanto López en el cementerio de Toba. / m. c. s.


Las pruebas de ADN confirman otras dos hijas del empresario Crisanto López . Gran Coruña

M. CARMEN SUÁREZ | CEE La rocambolesca historia de Crisanto López Míguez, un conocido empresario del sector maderero de Cee fallecido en 2007 y cuyo cadáver desapareció del camposanto en diciembre de 2009, parece no tener fin. Primero fue un vecino de Muxía, Manuel Enrique Caamaño, quien solicitó que se practicasen unas pruebas de ADN para confirmar que era hijo del industrial, tal como quedó probado más tarde.

Posteriormente fueron dos hermanas del municipio de Santa Comba, Rosa y Natalia, quienes siguieron sus pasos. Las dos aseguraban ser hijas de Crisanto, con quien su madre había tenido una relación cuando el empresario se desplazaba a hacer sus negocios a Santiago. La mujer regentaba una casa de comidas en la localidad de Fontecada, donde todavía recuerdan las paradas del conocido maderero de A Costa da Morte.

El Instituto de Medicina Legal de la Universidade de Santiago de Compostela acaba de confirmar las nuevas descendientes de Crisanto. Las pruebas de ADN realizadas por el departamento que dirige Ángel Carracedo determinaron que con un 99,8% de probabilidad, Natalia y Rosa son hijas del fallecido empresario. El resultado es similar al del otro hijo ilegítimo, que había arrojado un porcentaje de un 99,999%. Las pruebas pudieron realizarse comparando unas muestras de saliva de las demandantes con las de la hija legítima menor del empresario, que ante la negativa de sus hermanas, decidió prestarse al reconocimiento.

El juzgado de Corcubión tendrá que dictar ahora la oportuna sentencia a partir de las pruebas forenses, aunque los resultados no ofrecen demasiadas dudas. Crisanto López pasará de tener tres hijas legítimas con su esposa a seis, fruto de sus relaciones extramatrimoniales, por lo que la herencia del empresario quedará reducida a la mitad entre sus herederos.

El reparto de una millonaria herencia fue, precisamente, el que originó este peculiar culebrón, que todavía no tiene escrito un final debido a que el paradero del cadáver sigue siendo una incógnita. La Guardia Civil incluso abrió varios nichos en el cementerio parroquial de Toba para dar con su paradero, pero no pudieron encontrar ninguna pista del cuerpo ni del ataúd.

La denuncia de la desaparición se presentó cuando iban a exhumar el cadáver para practicarle las pruebas que confirmasen que Manuel Enrique era su hijo. Cuando el equipo judicial y los abogados llegaron al lugar se toparon con la sorpresa de que el nicho estaba vacío. Además, los restos de silicona que lo sellaban todavía estaban frescos, lo que indicaba que los hechos eran recientes y con un claro objetivo.


Yo no quiero ilusionar a nadie, pero si fuera el inmombrable me haría la prueba a ver si soy rico. No por nada, sino por la calaña que debe tener su progenitora viendo las dictaduras que él defiende.

http://www.laopinioncoruna.es/gran-coruna/2011/08/03/descendientes-crisanto/520107.html

Si a "nadie" le tocara parte , la donaria a los castro?

O al Museo de la Gaita.