Paisaje después del linchamiento
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Paisaje después del linchamiento
domingo 2 de octubre de 2011
Paisaje después del linchamiento
Andrés Reynaldo ante el último apabullamiento de las Damas de Blanco intenta resumir el panorama nacional:
Paisaje después del linchamiento
Andrés Reynaldo ante el último apabullamiento de las Damas de Blanco intenta resumir el panorama nacional:
En cualquier otro país, la Iglesia Católica y el Vaticano hubieran alzado su vehemente protesta. Pero no en Cuba. El silencio de los obispos de la isla y, en particular, del cardenal Jaime Ortega Alamino, arzobispo de La Habana, raya en la apostasía. Nunca en América Latina una dictadura había conseguido alejar a una Iglesia de su protectora misión de manera tan minuciosamente abyecta. En sus últimas declaraciones, Ortega ha disculpado a las autoridades centrales de cualquier papel en recientes y brutales ataques a la oposición pacífica en las provincias orientales. De paso, advirtió que la Iglesia no apoya ningún intento de cambiar el status quo. Así, nuestra jerarquía católica ha transitado del credo de Jesús al credo de Caifás.
Mucho ha cambiado la fibra moral del cubano desde 1959. La Iglesia que durante la lucha contra Fulgencio Batista fue refugio y, en no pocas ocasiones, bastión conspirador, ahora se parte de la risa haciéndole comparsa a Raúl Castro en el destierro de los disidentes. Los universitarios, ayer la abnegada y autónoma vanguardia de las causas nobles, hoy sirven de brazo paramilitar a una cúpula octogenaria y corrupta que apenas puede organizar el día a día entre la renuencia al cambio y el aterrado afán por ofrecer una apariencia de cambio. Exquisitos poetas glorifican las Palabras a los Intelectuales de Fidel Castro en 1961, un documento reaccionariamente pedestre incluso en la esfera del pensamiento estalinista. Trovadores que se oponen a la pena de muerte en el resto del mundo se apresuran a firmar un manifiesto a favor del fusilamiento de tres jóvenes negros que intentaron robar una lancha para escapar a Miami. Los jueces no se atreven siquiera a hacer valer a favor de los ciudadanos las espurias leyes de un gobierno ilegítimo y las cantantes de boleros confiesan a la prensa que el sueño de sus vidas es cantarle en la intimidad al Comandante.
En el exilio también se cuecen habas. Tenemos millonarios que van a refrescar sus vanidades políticas a Varadero y regresan conmovidos de que no les hayan pateado el trasero, poetisas de rango casero que acuden a La Habana para hacerse escuchar por estupefactos jóvenes llevados en guaguas desde sus escuelas, cubanólogos que teorizan acerca de “los cambios que no se ven” y el efecto benéfico de la revolución (ni de broma le dicen dictadura) sobre nuestra identidad. Tenemos mercaderes de arte y mercaderes del diálogo, aspirantes a presidentes que todavía le hacen carantoñas a la nomenclatura en aras de sacar su tajada de un hipotético proceso de transición y periodistas y blogueros que se dedican a pintar a los exiliados de Miami como la tranca en la rueda de la reconciliación nacional. Dándole la vuelta al verso de Nicolás Guillén: tenemos lo que no teníamos que tener.
http://enrisco.blogspot.com/
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Azali- Admin
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Fecha de inscripción : 27/10/2008
Re: Paisaje después del linchamiento
Sería interesante analizar este tema desde el punto de vista de Infocatolica.com y Religionenlibertad.com:
El silencio de los obispos de la isla y, en particular, del cardenal
Jaime Ortega Alamino, arzobispo de La Habana, raya en la apostasía.
Nunca en América Latina una dictadura había conseguido alejar a una
Iglesia de su protectora misión de manera tan minuciosamente abyecta.
luik- Cantidad de envíos : 9436
Fecha de inscripción : 11/07/2011
Edad : 41
Re: Paisaje después del linchamiento
Dicen las bolas, o sea los rumores, que al cardenal lo tienen chantajeado..
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Azali- Admin
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Fecha de inscripción : 27/10/2008
Re: Paisaje después del linchamiento
A quien lincharon?
Tetro- Cantidad de envíos : 5903
Fecha de inscripción : 08/03/2009
Re: Paisaje después del linchamiento
En Santiago de Cuba , han caido a golpes a las Damas de Blanco, en la Habana han dado golpe a las Damas de Blanco y a opositoras , algunas las tienen presas y etc.
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Azali- Admin
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Fecha de inscripción : 27/10/2008
Re: Paisaje después del linchamiento
La intolerancia y las malas políticas
Mientras que el sistema político cubano avanza hacia un estatus autoritario, en que más que la empatía se necesita la obediencia, la élite conserva su vocación totalitaria
La élite política cubana —viejos generales, burócratas ateridos y tecnócratas advenedizos— tiene un serio problema de identidad.
Para ella, hace algo más de dos décadas, todo estaba claro, pues administraba un país absolutamente subsidiado, cuya producción económica dependía de los vínculos políticos con Moscú. Y temas como la productividad, la eficiencia y la rentabilidad eran consignas baratas para los desfiles del primero de mayo. Luego cesaron los subsidios soviéticos, pero quedó en pie un discurso de protección social y una intensa y costosa movilización nacionalista. Y en el centro de todo, la figura de Fidel Castro, decadente pero con una aureola de fundador que una parte de la población —entonces relevante estadística y políticamente— todavía aceptaba como fuente de inspiración. O, al menos, de consolación.
Su problema ahora es otro: ya no puede gobernar como antes. Pero quiere seguir haciéndolo. Ya no ofrece protección efectiva, pero sigue reclamando lealtad sin fisuras. Denuncia el paternalismo, pero reclama el clientelismo. Los actuales “líderes” (para llamarles de alguna manera) no convencen a nadie de nada. En términos técnicos, mientras que el sistema político avanza hacia un estatus autoritario —en que más que la empatía, se necesita la obediencia— la élite conserva su vocación totalitaria, como si efectivamente estuviera en condiciones de exigir el alineamiento entusiasta de la gente en torno a la promesa de un mundo nuevo que ya ni siquiera pueden prometer.
Y de esta incongruencia sistémica brota el particular celo represivo que intenta devastar a la oposición, no importa su signo, tratando de guardar “las apariencias adecuadas”. Primero, siempre que se puede, dejando el trabajo sucio a las pandillas de-acción-rápida —cada vez más pequeñas y más deplorables—, o cambiando las condenas de 25 años por decenas de detenciones de algunas horas (con dormidas incluidas) en un proceso de desgaste sicológico y ético que parece no tener fin.
Para la élite política esta ambición totalitaria sin suelo firme representa una resta permanente de apoyos y oportunidades en los momentos en que más los requiere.
Veamos dos casos, sin detenerme en detalles que los lectores conocen y que ya discutí en otro artículo.
Primero, el asunto suscitado por la presentación de Pablo Milanés en Miami. Las declaraciones críticas de PM, aún en sus momentos más ríspidos, estuvieron siempre acompañadas de peros y sin embargos que reafirmaban la lealtad del trovador a lo que llamaba revolución; lo que significa, en última instancia, el proceso político cubano, la admiración por los llamados líderes históricos y la no compartición de los credos políticos de la oposición. PM nunca se confundió: su acercamiento a las Damas de Blanco fue un rechazo solidario a la bajeza ética del acto represivo, no un apoyo a sus demandas.
La coyuntura fue particularmente favorable a una buena jugada política. Si por buena política entendemos maximizar las oportunidades y reducir al mínimo los problemas, lo juicioso hubiera sido sacar ganancias mayores del recital y de sus pormenores. Por ejemplo, resaltar la fidelidad esencial de PM, recabarlo como producto neto de la revolución, enarbolar la velada como un signo de quiebra política de la “mafia de Miami” y proclamar las diferencias como un ejemplo de tolerancia y libertad dentro del sistema. Y en poco tiempo nadie se hubiera acordado de ello.
Pero los dirigentes cubanos no se gastan estas sutilezas e hicieron justamente lo opuesto: echaron encima del trovador a la jauría de los blogueros mal pagados que actúan como insultadores procaces y oficiosos del sistema, a sus portavoces en la emigración, y hasta supongo que habrán hecho su guiñito a Silvio Rodríguez cuando continuó cubriéndose de lodo atacando descarnadamente a su antiguo camarada de cantatas.
En otras palabras, pisotearon la oportunidad y agrandaron el problema.
Otro caso me lo recordó un inteligente analista de Havana Times (Boda gay cubana: Yoani Sánchez saca la victoria del refigerador), Alfredo Fernández, en relación con la boda de Wendy Iriepa e Ignacio Estrada. Una boda que fue absolutamente política. Pues solo esa determinación política puede explicar que la joven Wendy —que cambió de sexo atenazada por sus irreprimibles instintos femeninos— haya terminado casándose con un homosexual, lo haya hecho un 13 de agosto y haya dedicado su boda a un enemigo político y ferviente homofóbico como Fidel Castro.
Pero así es la política. Y también la vida. Y en contra de una buena apuesta, Mariela Castro y el CENESEX sacaron a Wendy de su plantilla y se negaron a presenciar la boda. Y a pesar de que Wendy era un producto de las gestiones del CENESEX y de sus influencias positivas en la política cubana, dejaron todo en manos del disidente Observatorio LGTB —al que acusaron de recibir dinero de la USAID— y de Yoani Sánchez, quien tiene un particular olfato para identificar las buenas oportunidades. Como dice el comentarista de HT, Yoani Sánchez “sacó la victoria del refrigerador” y se ganó otros quince minutos de fama.
Aunque en verdad no lo hizo sola: Mariela se encargó de la parte sucia.
http://www.cubaencuentro.com/opinion/articulos/la-intolerancia-y-las-malas-politicas-268839
Mientras que el sistema político cubano avanza hacia un estatus autoritario, en que más que la empatía se necesita la obediencia, la élite conserva su vocación totalitaria
La élite política cubana —viejos generales, burócratas ateridos y tecnócratas advenedizos— tiene un serio problema de identidad.
Para ella, hace algo más de dos décadas, todo estaba claro, pues administraba un país absolutamente subsidiado, cuya producción económica dependía de los vínculos políticos con Moscú. Y temas como la productividad, la eficiencia y la rentabilidad eran consignas baratas para los desfiles del primero de mayo. Luego cesaron los subsidios soviéticos, pero quedó en pie un discurso de protección social y una intensa y costosa movilización nacionalista. Y en el centro de todo, la figura de Fidel Castro, decadente pero con una aureola de fundador que una parte de la población —entonces relevante estadística y políticamente— todavía aceptaba como fuente de inspiración. O, al menos, de consolación.
Su problema ahora es otro: ya no puede gobernar como antes. Pero quiere seguir haciéndolo. Ya no ofrece protección efectiva, pero sigue reclamando lealtad sin fisuras. Denuncia el paternalismo, pero reclama el clientelismo. Los actuales “líderes” (para llamarles de alguna manera) no convencen a nadie de nada. En términos técnicos, mientras que el sistema político avanza hacia un estatus autoritario —en que más que la empatía, se necesita la obediencia— la élite conserva su vocación totalitaria, como si efectivamente estuviera en condiciones de exigir el alineamiento entusiasta de la gente en torno a la promesa de un mundo nuevo que ya ni siquiera pueden prometer.
Y de esta incongruencia sistémica brota el particular celo represivo que intenta devastar a la oposición, no importa su signo, tratando de guardar “las apariencias adecuadas”. Primero, siempre que se puede, dejando el trabajo sucio a las pandillas de-acción-rápida —cada vez más pequeñas y más deplorables—, o cambiando las condenas de 25 años por decenas de detenciones de algunas horas (con dormidas incluidas) en un proceso de desgaste sicológico y ético que parece no tener fin.
Para la élite política esta ambición totalitaria sin suelo firme representa una resta permanente de apoyos y oportunidades en los momentos en que más los requiere.
Veamos dos casos, sin detenerme en detalles que los lectores conocen y que ya discutí en otro artículo.
Primero, el asunto suscitado por la presentación de Pablo Milanés en Miami. Las declaraciones críticas de PM, aún en sus momentos más ríspidos, estuvieron siempre acompañadas de peros y sin embargos que reafirmaban la lealtad del trovador a lo que llamaba revolución; lo que significa, en última instancia, el proceso político cubano, la admiración por los llamados líderes históricos y la no compartición de los credos políticos de la oposición. PM nunca se confundió: su acercamiento a las Damas de Blanco fue un rechazo solidario a la bajeza ética del acto represivo, no un apoyo a sus demandas.
La coyuntura fue particularmente favorable a una buena jugada política. Si por buena política entendemos maximizar las oportunidades y reducir al mínimo los problemas, lo juicioso hubiera sido sacar ganancias mayores del recital y de sus pormenores. Por ejemplo, resaltar la fidelidad esencial de PM, recabarlo como producto neto de la revolución, enarbolar la velada como un signo de quiebra política de la “mafia de Miami” y proclamar las diferencias como un ejemplo de tolerancia y libertad dentro del sistema. Y en poco tiempo nadie se hubiera acordado de ello.
Pero los dirigentes cubanos no se gastan estas sutilezas e hicieron justamente lo opuesto: echaron encima del trovador a la jauría de los blogueros mal pagados que actúan como insultadores procaces y oficiosos del sistema, a sus portavoces en la emigración, y hasta supongo que habrán hecho su guiñito a Silvio Rodríguez cuando continuó cubriéndose de lodo atacando descarnadamente a su antiguo camarada de cantatas.
En otras palabras, pisotearon la oportunidad y agrandaron el problema.
Otro caso me lo recordó un inteligente analista de Havana Times (Boda gay cubana: Yoani Sánchez saca la victoria del refigerador), Alfredo Fernández, en relación con la boda de Wendy Iriepa e Ignacio Estrada. Una boda que fue absolutamente política. Pues solo esa determinación política puede explicar que la joven Wendy —que cambió de sexo atenazada por sus irreprimibles instintos femeninos— haya terminado casándose con un homosexual, lo haya hecho un 13 de agosto y haya dedicado su boda a un enemigo político y ferviente homofóbico como Fidel Castro.
Pero así es la política. Y también la vida. Y en contra de una buena apuesta, Mariela Castro y el CENESEX sacaron a Wendy de su plantilla y se negaron a presenciar la boda. Y a pesar de que Wendy era un producto de las gestiones del CENESEX y de sus influencias positivas en la política cubana, dejaron todo en manos del disidente Observatorio LGTB —al que acusaron de recibir dinero de la USAID— y de Yoani Sánchez, quien tiene un particular olfato para identificar las buenas oportunidades. Como dice el comentarista de HT, Yoani Sánchez “sacó la victoria del refrigerador” y se ganó otros quince minutos de fama.
Aunque en verdad no lo hizo sola: Mariela se encargó de la parte sucia.
http://www.cubaencuentro.com/opinion/articulos/la-intolerancia-y-las-malas-politicas-268839
Tetro- Cantidad de envíos : 5903
Fecha de inscripción : 08/03/2009
Re: Paisaje después del linchamiento
Azali escribió:Dicen las bolas, o sea los rumores, que al cardenal lo tienen chantajeado..
Precisamente, lo que estamos promoviendo en Internet ahora es comenzar a controlar a los clérigos.
Aun los que no somos muy creyentes que digamos, hemos de estar conscientes de la influencia que la Iglesia todavía ejerce en la sociedad, como lo hace el peridodismo, por ejemplo.
Entonces hay que conocer a los clérigos y pedirles cuentas.
luik- Cantidad de envíos : 9436
Fecha de inscripción : 11/07/2011
Edad : 41
Re: Paisaje después del linchamiento
Luik
Precisamente, lo que estamos promoviendo en Internet ahora es comenzar a controlar a los clérigos.(Luik)
Lo malo es que tú estás bien desprestigiado
Precisamente, lo que estamos promoviendo en Internet ahora es comenzar a controlar a los clérigos.(Luik)
Lo malo es que tú estás bien desprestigiado
Tetro- Cantidad de envíos : 5903
Fecha de inscripción : 08/03/2009
Re: Paisaje después del linchamiento
Tetro escribió:Luik
Precisamente, lo que estamos promoviendo en Internet ahora es comenzar a controlar a los clérigos.(Luik)
Lo malo es que tú estás bien desprestigiado
https://debates.1talk.net/t10674-tetro-ofo-es-un-lavaexcusados-de-los-gringos
luik- Cantidad de envíos : 9436
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