El cable de internet , llego a Cuba desde Venezuela hace un an~o..

Y nada de nada, no dicen que paso ni para que lo esta usando el regimen...supongo que hara "su trabajito" para las proximas elecciones en Venezuela.

El cable: un año después

• 
  

Por estos días hará un año de la llegada a costas cubanas del cable submarino de fibra óptica que finalmente dotaría a los cubanos de un acceso a Internet de banda ancha.

La idea del Ministerio de Informática y Telecomunicaciones nunca fue que el cable trajera servicio de Internet a todos los particulares cubanos que así lo desearan: los discursos oficiales insistieron siempre en “priorizar (léase mediatizar) el acceso social a las TIC a través de espacios tales como escuelas, jovenclubs, universidades, centros hospitalarios, bibliotecas, y centros de investigación”. Aún así, la espectativa era grande, pues no era difícil deducir que una vez que estuviera en funcionamiento el cable, los cubanos encontrarían maneras creativas de acceso a una Red tres mil veces más rápida —de la misma manera que hoy encuentran atajos para seguir conectados e informar sobre lo que sucede en la isla.

Sin embargo, la reciente ola de propaganda gubernamental sobre el tema de la “ciberguerra” coincide con una falta absoluta de información sobre el destino del esperado cable. Tómense el trabajo de echarle un vistazo a las últimas noticias sobre el tema. Clones censurados de sitios emblemáticos del social media, griterío oficialista que pretende ahora “ocupar la Red” con su mensaje propagandístico, dobles discursos instrumentales, satanización de la blogosfera independiente y los sitios web que informan desde el exilio… Todo parece indicar que las autoridades cubanas han dedicado este año a prepararse para sustituir la estrategia de uso basada en la limitación del acceso por un nuevo modelo de dosificación, monitoreo y censura de los contenidos, así como un notable incremento de la actividad y los discursos progubernamentales en la Red.

Parte de esta estrategia “proactiva”, digamos, es el desbloqueo de sitios que hasta hace poco estuvieron censurados en la isla. Los blogs de la plataforma Voces cubanas (incluido el anatemizado Generación Y), así como CubaEncuentro y Café Fuerte, ya son accesibles para los poquísimos cubanos que puedan pagar la lentísima conexión de los hotales. Y por supuesto, ahora los troles gubernamentales lo tienen mucho más fácil para “combatir” las opiniones del “enemigo”.

El reciente evento sobre “medios alternativos y redes sociales” convocado por el MINREX esbozó también esa estrategia de “combatir al enemigo con sus propios medios” —al tiempo que desplegaba un evidente andamiaje de cinismo en el país con el menor índice de acceso a la Red del hemisferio occidental. La ideología prolifera, pero el cable sigue siendo tabú.

Corre el rumor de que un reciente caso de corrupción en ETECSA tiene algo que ver con esta parálisis inexplicada de la banda ancha. El pasado verano varios ejecutivos fueron detenidos por una investigación supuestamente relacionada con el cable submarino. Leonardo Cruz Valero, vicepresidente de Negociación y Logística de la Empresa, se quedó en Panamá. De Máximo Lafuente, vicepresidente de telefonía móvil de la empresa, no hemos vuelto a saber. El presidente de ETECSA Maimir Mesa, y los viceministros de Informática y Comunicaciones, Ramón Luis Linares y Alberto Rodríguez Arufe, han desaparecido como por encanto de la escena pública. Reuters habló de irregularidades financieras por encima del medio millón de dólares “vinculadas a un fraude con tarjetas de prepago para teléfonos celulares y de turbios manejos relacionados con el cable submarino de fibra óptica”, pero los medios oficiales (esa misma prensa que según Raúl Castro tiene que atreverse a decir la verdad) mantienen un silencio sepulcral sobre el asunto.

El otro rumor, más inquietante, es que la banda ancha ya está en funcionamiento (en fase de pruebas) pero con carácter selectivo: es decir, al servicio de la maquinaria gubernamental. Lo afirma un ingeniero en Telecomunicaciones que trabajó en el Ministerio de Comunicaciones. Aunque abandonó Cuba en 1994, ha seguido en contacto con antiguos colegas, que serían la fuente de esta sorprendente exclusiva: el Ministerio de Comunicaciones y el Ministerio del Interior serían los únicos usuarios de la banda ancha en la isla hasta este momento.

Un año después de su llegada a la isla, el más absoluto secretismo sigue rodeando el destino del cable cuyo tendido costó 72 millones de dólares —según cifras oficiales. Los seis meses que debió tardar su puesta en funcionamiento se han duplicado sin explicaciones. Ningún informe o debate partidista lo mencionó durante estos meses de intensa actividad política.

Lo que fue anunciado en su momento como una gran victoria tecnológica es hoy uno de los fiascos más visibles y emblemáticos del gobierno raulista.

http://www.penultimosdias.com/2012/02/10/el-cable-un-ano-despues/

Y para controlar Venezuela.