La desigualdad que parió la Revolución cubana

La desigualdad que parió la Revolución cubana


By Joan Antoni Guerrero Vall On mayo 20, 2013 In Cuba, Economía No hay comentarios

Turistas en Varadero. Foto: Flickr.
La desigualdad social en la Cuba actual genera todavía oportunidades de negocio. Lo saben bien las empresas extranjeras instaladas en la Isla, como las del sector turístico. Las reformas raulistas han traído algo de prosperidad a un núcleo de la población que, gracias a la contribución del dinero que viaja desde el exilio, pueden explotarse económicamente entre ellos.
Como dice el economista Elías Amor en Cuba funcionan dos sistemas económicos paralelos, es decir, está la Cuba for free (que es la que viven la mayoría, en moneda nacional) y otra que es la de servicio Premium (al acceso de una minoría, que se mueve con la moneda fuerte y paga servicios a precio de Madrid, París o Londres).
Este mayo se celebra el 23 aniversario del aterrizaje de la cadena hotelera Melià en Cuba, con la apertura en 1990 del hotel Sol y Palmeras en Varadero. En Caribbean News sus responsables aseguran que se han propuesto como objetivo atraer a sus instalaciones al turista nacional cubano, a parte del extranjero.
Un objetivo que es posible ahora, que ya el marco legal levantó la prohibición que tenían los cubanos de pasar una noche en un hotel en su país. Pero además, choca este objetivo cuando sabemos que el cubano medio cobra 20 dólares mensuales. O hay que robar mucho para pagarse unas vacaciones en Varadero o bien el que se lo paga obtiene ingresos por una vía preferente inalcanzable para la mayoría.
Una evidencia más de la desigualdad social parida por la Revolución cubana.



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